Madrid. El número dos del mundo, Rafael Nadal, no dio opción este miércoles a su joven compatriota Carlos Alcaraz, al que ganó 6-1 y 6-2 en su arranque en el torneo de Madrid.
El joven Alcaraz, que cumplía 18 años, acabó de forma agridulce su sueño de jugar con Nadal, su gran ídolo, en el duelo entre el presente y el futuro del tenis español.
Alcaraz (120º del mundo), al que muchos consideran el sucesor de Nadal, empezó con ganas este partido de segunda ronda, pero no pudo hacer nada ante el primer cabeza de serie del torneo madrileño, que empezó rompiendo su saque.
Con 2-0 en el marcador, el joven tenista tuvo que pedir la asistencia del fisio, tras sufrir un problema en los abdominales al devolver una bola.
Alcaraz siguió jugando, pero incómodo, perdió los 10 siguientes juegos y apenas fue rival ante Nadal, que se colocó 5-0 y se mostró arrollador.
El rey de la tierra batida apenas dio opción a su rival, que cometió muchos errores y prácticamente se dedicó a defenderse.
Ya en la segunda manga, el joven Alcaraz, al que la organización agasajó con un gran pastel de cumpleaños al finalizar el encuentro, pareció soltarse un poco y logró romper el servicio de Nadal, que no tardó en recuperarlo para acabar llevándose el set y el partido.
«La victoria en Barcelona me ha ayudado mucho, desde entonces la cosas han ido a mejor», afirmó Nadal, que tuvo grandes palabras de elogio para su rival.
Es «un joven que viene muy fuerte, que tiene un potencial enorme y lo único que necesita es tiempo. Quiero desearle lo mejor», añadió el número dos del mundo.
Nadal se enfrentará en tercera ronda al ganador del duelo entre joven italiano Jannick Sinner y el australiano Alexei Popyrin.
AFP