Brasil, a defender favoritismo ante Chile en la Copa América

Foto Europa Press

Río de Janeiro. Las selecciones de Perú y Paraguay abrirán hoy los cuartos de final de la Copa América, en una jornada en la que el anfitrión Brasil defenderá su favoritismo ante un irregular Chile en un choque de alta expectativa.

La Verdeamarela avanzó a la fase de los ocho mejores como primera del Grupo B, invicta tras ganar tres partidos y empatar el último, y es una de las candidatas a obtener el título. Chile, por su parte, que-dó en el cuarto lugar del Grupo A en la primera fase tras haber ganado sólo un encuentro, ante la eliminada Bolivia.

El partido en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro enfrentará a los campeones de las recientes tres ediciones de la Copa, ya que Chile levantó el trofeo en 2015 y 2016, mientras Brasil lo hizo en 2019.

“Tenemos que hacer el mejor partido de los que hemos jugado hasta ahora. Brasil ha dado muestras de ser el equipo posiblemente más en forma y eso lógicamente genera una dificultad, pero también es una oportunidad”, dijo el entrenador de Chile, Martín Lasarte.

Más temprano, Perú intentará mostrar que quiere seguir creciendo en un torneo en el que avanzó de forma paulatina cuando enfrente en el estadio Olímpico de Goiânia a un equipo paraguayo golpeado por la lesión de su mediocampista estrella Miguel Almirón.

“(Perú) Es un equipo que hace tiempo juega bien, se asocia, tiene elaboración, con gente peligrosa en ataque, nos preparamos en estos días pensando en hacer lo mejor”, señaló el técnico de Paraguay, el argentino Eduardo Berizzo.

La fase que definirá a los semifinalistas continuará el sábado con el duelo entre el otro gran favorito, Argentina, que encabezó cómodamente el Grupo A, y Ecuador, que no logró ganar partidos en la fase anterior, pero tiene un equipo joven y dinámico que despierta respeto.

El ganador del choque que también se jugará en Goiânia enfrentará en semifinales a la selección que triunfe en un duelo que se presagia parejo entre Colombia y Uruguay, en el Mané Garrincha de Brasilia.

Reuters