Washington. La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, informó ayer que el Congreso establecerá una comisión independiente similar a la de los atentados del 11 de septiembre de 2001 para que examine la insurrección en el Capitolio federal.
Pelosi refirió que la comisión “investigará y reportará sobre los hechos y causas relacionados con el ataque terrorista interno del 6 de enero de 2021 contra el complejo del Capitolio de Estados Unidos… y relacionados con la interferencia a la transferencia pacífica del poder”.
En una carta dirigida a sus colegas demócratas, Pelosi les externó que la cámara baja también ejercerá un gasto adicional para incrementar la seguridad del Capitolio.
Después de que el ex presidente Donald Trump fue absuelto en su segundo juicio político en el Senado el fin de semana, parece crecer el apoyo bipartidista para la creación de una comisión independiente con el fin de que examine la insurrección.
Ya se tenían planeadas investigaciones sobre los disturbios: se programaron audiencias este mes en la Comisión de Normas del Senado.
Pelosi pidió a Russel Honoré, teniente general retirado del ejército, que encabece una revisión inmediata del proceso de seguridad del Capitolio.
En su carta ayer, Pelosi manifestó que “está claro, con base en sus hallazgos y en el juicio político, que debemos encontrar la verdad de cómo ocurrió esto.
“También está claro a partir de los reportes interinos del general Honoré que debemos ejercer una partida adicional para la seguridad de los miembros y la seguridad del Capitolio”, agregó.
En declaraciones en noticiarios dominicales, legisladores de ambos partidos señalaron que es probable que haya más indagaciones.
El veredicto del Senado el sábado, por 57 votos a favor y 43 en contra, difícilmente apacigua el debate en torno de la culpabilidad del ex presidente republicano por el asalto del 6 de enero.
“Debería haber una investigación completa sobre lo que pasó”, dijo el senador Bill Cassidy, uno de los siete republicanos que votaron por condenar a Trump. “¿Qué se sabía, quién lo sabía y cuándo lo sabía?, todo, porque eso construye la base para que esto no vuelva a ocurrir”.
El fiscal general del distrito de Columbia, donde se encuentra Wa-shington, Karl Racine, advirtió que podía apoyarse en una ley local que permite el enjuiciamiento “contra personas que obviamente fomentan” la violencia. En este contexto, Trump se arriesgaría a seis meses de prisión, explicó en MSNBC, el 17 de enero, recordó Afp.
Por su parte, el fiscal federal de Washington, Michael Sherwin, ya ha procesado a decenas de personas por su papel en los disturbios. Y algunas víctimas, en teoría, podrían lanzar acciones legales contra el ex presidente.
La agencia Ap informó que además de manifestantes involucrados, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) investiga la supuesta implicación de 21 miembros en activo o retirados del ejército y policías ya identificados en el asalto.
En tanto, el departamento de policía de Los Ángeles investiga denuncias de que algunos agentes intercambiaron una foto de George Floyd con el texto “You take my breath away” (“Me dejas sin aliento”) en forma de tarjeta de San Valentín. Floyd, de raza negra, murió en mayo pasado después de que un agente de Minneapolis puso su rodilla en su cuello mientras Floyd repetía: “No puedo respirar”. Su muerte provocó protestas masivas en el país contra la injusticia racial y la brutalidad policial en el más importante movimiento social en décadas.
“Esto es un insulto a nuestro duelo, un insulto a su muerte. El nivel de insensibilidad y crueldad de alma necesaria para hacer algo así va más allá de la comprensión y es indicativo de un problema mucho mayor dentro de la cultura del departamento de policía”, dijo Ben Crump, abogado de la famiia de Floyd.
AFP y Ap