México podría jugar a puerta cerrada el partido de mañana en el Cotton Bowl de Dallas frente a Guatemala, correspondiente a la Copa Oro, luego de haberse escuchado en tres ocasiones el grito “eh, puto”en Ar-lington, en el estadio de los Vaqueros el sábado por la noche, cuando el Tri debutó frente a Trinidad y Tobago, señaló Yon de Luisa, titular de la Federación Mexicana de Futbol.
El directivo externó gran molestia y preocupación por la lesión de Hirving Chucky Lozano: “No podemos seguir permitiendo que nuestros jugadores salgan lesionados por el arbitraje”, puntualizó.
México ha sido sancionado varias veces por la FIFA a causa del grito considerado homofóbico, y ahora están a la expectativa. “En cuanto a posibles sanciones, no hemos sido notificados, entendemos que están revisando, pero ahorita no tenemos ninguna información”, señaló De Luisa, quien subrayó que la organización del certamen “no aplicó debidamente” los protocolos que en partidos anteriores redundaron en la casi extinción del grito.
“Como pudieron ver en los partidos previos se logró erradicar, sabemos que debemos ir partido a partido y que todo lo que hacemos antes y durante el juego tiene efecto sobre la conducta de nuestra afición. Condenamos el grito en su totalidad y trabajaremos de cerca con la Concacaf para que puedan implementar el protocolo con SUM (Soccer United Marketing).
Destacó que una cosa es cuando aparece el grito “y eres local, y otra donde vamos como un tercero y no somos responsables… le toca a Concacaf. (Pero) deseamos con todo nuestro corazón que se elimine cualquier acto discriminatorio”, dijo en rueda de prensa.
Respecto a la impresionante lesión del Chucky Lozano –requirió 40 puntos de sutura en la cabeza–, criticó a los silbantes. “Lo del arbitraje no es del partido pasado, sino desde el torneo Liga de Campeones, la Nations League y ahora Copa Oro; hemos decidido mandar una serie de comunicados al secretario general de la Concacaf y de la FIFA alertando por la integridad del futbolista mexicano.
“No hay ningún torneo que esté por encima de la integridad física de nuestros jugadores, no queremos que haya más lesionados por el arbitraje”. En particular, sobre el costarricense Ricardo Montero precisó: “vamos a exigir que nos digan por qué actuó como actuó y si se le va a inhabilitar y cuán-tos partidos”.
Dijo que, por ahora, lo importante es que Hirving, jugador del Nápoles de Italia, se encuentra estable, “ayer pudimos hablar con él. Está adolorido, pero tranquilo”, informó que seguirá en observación y permanecerá esta semana hospitalizado en Dallas. “Lo importante es que esté bien y pronto lo veamos con la selección y su club”.
Precisó que México no quiere privilegios, sino que sus jugadores tengan la misma protección que cualquier otro futbolista del área. “Vemos grave la situación de los silbantes, queremos apoyar a la Concacaf para que crezca el arbitraje”.
Finalmente, el directivo reconoció que se ha dificultado conseguir un partido adicional a la Sub-23 que participará en los Juegos Olímpicos de Tokio. “Es nuestra ilusión poder tener un último partido previo al debut contra Francia, pero no ha sido sencillo por los protocolos determinados por el COI y la FIFA”, explicó.
Marlene Santos Alejo, La Jornada