Ciudad de México. El alza en jitomate, aguacate, tortillas, entre otros productos en el mes de abril llevaron a que la inflación anual se ubicara en 6.08 por ciento, el dato más alto desde diciembre de 2017, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Al cierre del cuarto mes del año el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó 0.33 por ciento por arriba del nivel observado en marzo.
Julio Santaella, presidente del Inegi, señaló en su cuenta de Twitter que la inflación observada es la más alta desde diciembre de 2017, mientras que analistas de Grupo Monex apuntaron que es el nivel más alto en 25 años.
El resultado publicado este viernes se aleja del objetivo del Banco de México, el cual es 3 por ciento con un intervalo de un punto porcentual hacia arriba o hacia abajo.
Lo anterior se explica por el aumento de 0.21 por ciento mensual en el índice de precios no subyacentes, el cual incluye los productos más volátiles como los agropecuarios. En su medición anual el componente se colocó en 12.34 por ciento.
El índice de precios subyacente, que incluye vivienda, mercancías y servicios, mostró un alza de 0.37 por ciento en comparación con el mes anterior inmediato, mientras que en su comparación anual se ubicó en 4.13 por ciento.
Los productos con mayor alza en abril fue el jitomate con 26.09 por ciento mensual, el aguacate con 29.46 por ciento, el chile serrano con 41.75 y la tortilla de maíz con 1.83. Por el contrario, la energía eléctrica se redujo 12.03 por ciento mensual debido a los ajustes en las tarifas eléctricas en 18 ciudades del país durante la temporada cálida.
Santaella destacó que ante el aumento en el precio internacional del maíz, es de interés la variación anual en el precio productor del maíz muestra una tendencia al alza alcanzado 14.74 por ciento en abril, mientras que el precio de la harina de maíz ha sido más estable al ubicarse en 4.29 por ciento.
Analistas de Citibanamex señalaron que es la inflación más alta para un mes de abril desde 2009, cuando ocurrió la crisis financiera global. Estimaron que que hacia adelante la inflación anual comience una modesta tendencia a la baja, principalmente como resultado de efectos de base de comparación favorables. Añadieron que esperan que 2021 cierre en 5.1 por ciento.
Los analistas de Monex comentaron que la desviación respecto al escenario de una inflación controlada que se planteaba apenas hace unos meses es considerable y difícilmente regresará a ubicarse dentro del rango del BdeM.
Agregaron el dato sugiere un genuino incremento en la velocidad del avance de varios precios en los primeros meses del año.
Dado que varias de estas presiones se siguen percibiendo en mayo y probablemente se incrementen ante la reapertura de las actividades, estimaron que el sesgo inflacionario se mantendrá al alza por un tiempo.
Alejandro Alegría / La Jornada